Mientras participantes de más que 30 países en la reunión del Comité Ejecutivo Internacional (CEI) del CIT regresaron a casa, una intensificación de la lucha de clases en el año que viene pareció más y más asegurada.
Los periódicos y noticias hablaron de los prospectos de problemas severos económicos e incluso recesión, los cual significan tiempos duros y lucha para los trabajadores, campesinos y pobres del mundo.
En la reunión, camaradas de todos los partes del mundo—desde Bolivia hasta Sri Lanka, Rusia hasta Nigeria y Pakistan hasta EEUU, etc.—confirmaron la perspectiva de un empeoramiento de la situación económica para el capitalismo y el prospecto aumentado de lucha de trabajadores, campesinos y pobres. Las enormes burbujas de deuda, que hasta ahora han prevenido un colapso del sistema consumista de capitalismo, están a punto de reventar. Decenas de billones de dólares están siendo gastados para rescatar los grandes bancos y empresas privadas, mientras cientos de millones de personas pasan hambre y viven en las calles en la peor miseria.
Primero, el CEI habló de la situación en Latinoamérica, el continente que ha experimentado las luchas más fuertes e inspiradoras en el reciente periodo. Lo más esperanzador para el CIT ha sido la respuesta en Brasil al trabajo de nuestra sección, Socialismo Revolucionario, con respeto a nuestros esfuerzos para que el Partido por Socialismo y Liberación (P-SOL), un nuevo partido de trabajadores, desarrolle como una fuerza activa por socialismo (ver página 6). Asuntos importantes como el referéndum de Chávez en Venezuela y la Asamblea Constituyente en Bolivia también fueron discutidos.
La conversación sobre el desarrollo de la economía mundial con respecto a las relaciones entre los grandes poderes económicos mundiales duró dos días y toco temas como la posibilidad de una recesión mundial, la crisis que va desarrollándose en Asia y el reciente levantamiento en Birmania. También, hubo contribuciones iluminantes sobre Pakistán, Sri Lanka, India y Malaysia, donde el movimiento oposicionista más grande en los últimos diez años ha empezado.
Las elecciones en Australia y en Nigeria, fueron escudriñadas durante la sesión sobre relaciones mundiales, igual como las batallas viciosas entre los dirigentes del partido gobernante el África del Sur, que han revelado claramente el corazón podrido que es la democracia capitalista.
Camaradas estadounidenses del CEI describieron el sentimiento creciente de oposición hacia los dos partidos capitalistas, los Demócratas y Republicanos, mientras los dos siguen matando gente inocente y gastando billones de dólares en la guerra odiada de Irak. Camaradas del Medio Oriente y Rusia hicieron contribuciones importantes con respecto a los horrores de la guerra en Irak también.
Una pregunta importante que le esta poniendo a prueba las fuerzas cerebrales de los economistas capitalistas y de Marxistas también es si la economía ‘super-cargado’ de China puede aguantar el empeoramiento de la economía mundial o incluso evitarlo. Ambos escenarios fueron casi completamente eliminados. De hecho, las contradicciones internas del capitalismo, especialmente la brecha enorme entre ricos y pobres, pueden terminar en grandes conflictos y cambios en la conciencia con respeto a lo que es necesario para resolver los problemas.
El CEI reconoció el hecho de que un empeoramiento en la economía mundial no va a resultar inevitablemente en una explosión de lucha de clases en los sitios de trabajo. Pero, definitivamente, existe descontento y rabia en contra de gobiernos, patrones y políticos en muchos países. Dirigentes sindicales han obstaculizado la acción de trabajadores con tanta frecuencia que existe un deseo de desarrollar organizaciones desde abajo. Iniciativas de formar nuevos partidos masivos de trabajadores han tenido buenos o malos resultados en países diferentes. La experiencia de P-SOL en Brasil apareció en la discusión del CEI sobre construyendo nuevos partidos de trabajadores y la de Europa también. El Partido "Izquierda" en Alemania, en el Prc en Italia y el Partido Socialista de Escocia entre otros fueron examinados junto con iniciativas recientes de trabajadores e izquierdistas en Inglaterra, Francia, Bélgica y Grecia, todos los que involucran las secciones del CIT. Contribuciones de Austria, Suecia, Polonia, Irlanda (Norte y Sur), la República Checa y Rusia también fueron importantes para entender la dirección de la lucha y nuestro rol en el periodo que viene.
Una semana no fue suficiente para escuchar a detalle el trabajo importantísimo de los miembros del CIT en todas las partes del mundo. Trotsky dijo que los revolucionarios crecen mientras sus responsabilidades crecen. Incluso en periodos relativamente difíciles de convencer a trabajadores y jóvenes de la necesidad de luchar por el socialismo, los revolucionarios socialistas del CIT han demostrado la capacidad de dirigir y ganar batallas. En esta época, victorias relativamente pequeñas han sido muy importantes e incluso los fracasos, cuando analizados cuidadosamente, han proveído lecciones valerosas.
Lo que estuvo claro en todos los informes, fue una confianza verdadera y el sentimiento de que los acontecimientos están cambiando a nuestro favor, llenando nuestras filas con los mejores luchadores de clase y preparándonos para las luchas inevitables de 2008.
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