Con suerte solo ganaran un poco de tiempo.
Ya está claro que el gobierno de Bachelet tiene la firme intención de neutralizar a los movimientos sociales y dentro de lo posible desmantelarlos, todos los anuncios del gobierno en sus primeros días apuntan precisamente a este objetivo.
Para lograr esto ya están haciendo una serie de promesas y “gestos” de cara al movimiento social, los llamados al “dialogo” al movimiento estudiantil, prometiendo cumplir con las demandas de los jóvenes, reiterando también al movimiento sindical su intención de impulsar reformas laborales en el corto plazo, por otro lado el Intendente de la novena región (Araucanía) Francisco Huenchumilla pidiendo perdón a los mapuche en nombre del Estado chileno por los atropellos de sus derechos, también hay señales dirigidas a los medioambientalistas con la reevaluación al proyecto de HidroAysén y el retiro de la Ley Monsanto, además prometiendo imprimir urgencia al Acuerdo de Vida en Pareja, AVP para contener al movimiento gay. Todos estos “gestos” tienen como objetivo crear ilusiones de que los cambios ya están en camino y con esto pretenden desactivar eventuales focos de conflicto para el gobierno.
¿Que contempla el plan del gobierno?
La primera parte de esta estrategia apunta a llamados al dialogo con los dirigentes sociales, estudiantes, sindicales, pobladores, mapuche, medioambientalistas, movimiento Gay, etcétera. Pero además el plan también contempla la “contratación” en los diferentes ministerios de los actores más relevantes del movimiento social, esto apunta fundamentalmente a reclutar a ex dirigentes estudiantiles, dado que estos han sido los actores más relevantes en el último tiempo, el objetivo es claro intentar frenar a los movimientos sociales, para que no pongan presión para que realmente se realicen los cambios que este país requiere. Pero también debemos tener claro que no existirá un verdadero dialogo y menos una real negociación para apuntar a cumplir con las demandas más sentidas del movimiento social en general, todo más bien apunta a la vieja política de cambiar algo, para que en el fondo nada cambie, esto es casi tan viejo como la política.
El rol del Partido Comunista.
El gobierno también intentara anticiparse a los conflictos, para esto necesitara el concurso del Partido Comunista, la idea es usar a los dirigentes sociales con los que cuenta el PC, fundamentalmente en el movimiento estudiantil y sindical para que ayuden a frenarlos, bueno en este “trabajo” el PC tiene un rival y socio a la vez, el Partido Socialista (PS) que también quiere demostrar su capacidad para intentar desarticular a los movimientos sociales, como ya lo hicieron antes bajo los otros gobiernos concertacionistas, pero ahora contaran con sus aliados del PC para cumplir con este objetivo.
Fortalecimiento de los equipos de inteligencia.
La idea del gobierno de Bachelet es que junto con todas las medidas que han tomado para frenar de manera “limpia” los movimientos sociales, también se debe fortalecer el mecanismo de inteligencia. Para hacer este “trabajo” nombro como director de la Agencia Nacional de Inteligencia, ANI, a un militante del PS, el abogado Gustavo Villalobos, que sin lugar a dudas usara a algunos militantes del PS y PC que hoy son parte de algunos de estos movimientos sociales como informantes para poder cumplir con los planes del gobierno de la señora Bachelet de desbaratar los movimientos sociales.
Con suerte solo ganaran un poco de tiempo.
Hay un sector de la población que tendrá ilusiones con el oferton de promesas que se están lanzando, esos 50 proyectos que se han prometido para los primeros 100 días de gobierno y por un tiempo algunos se quedaran esperando que se cumplan estas ofertas, pero como también está claro que no existe una real intención de avanzar en las demandas de fondo del movimiento social, las luchas inevitablemente se retomaran con más fuerza en el próximo periodo.
Be the first to comment