Carta unitaria a favor de los derechos de los militantes de SR-CIT
A continuación publicamos la contribución de un grupo de militantes sobre la comisión aclaratoria aprobada en la reunión de la Mesa Nacional del 26 de noviembre, y que tiene por objetivo impedir la afiliación al Bloco de los compañeros de Socialismo revolucionario (CIT). Esta muestra de solidaridad es una gran noticia y debe contribuir a una rectificación de la Mesa Nacional del Bloco. Puedes consultarla en portugués en la web del Bloco www.bloco.org (http://www.bloco.org/content/view/3177/1/)
El Bloco de Esquerda nació de la voluntad agregadora de varias izquierdas inconformistas y combativas. La pluralidad ha sido nuestra fuerza, no nuestra debilidad.. La democracia interna no puede ser vista como un detalle, sino como una parte inseparable de nuestro proyecto político. Así, nos oponemos firmemente al proceso abierto en la última Mesa Nacional a un grupo de militantes del Bloco de Esquerda.
El derecho a la formación de tendencias se encuentra consagrado en los Estatutos del Bloco de Esquerda y debe respetarse tal cual. En este sentido, la Comisión Aclaratoria (CA) que la mayoría de la Mesa Nacional decidió instaurar contra un conjunto de militantes constituye un retroceso potencial en nuestra historia colectiva. En primer lugar, a pesar de que los afiliados organizados en el grupo denominado “Socialismo Revolucionario” se unieron al BE en diferentes momentos, sólo se ha decidido abrir un proceso disciplinario en el momento en que se supo que estos camaradas tenían la intención de constituirse como tendencia oficial.
En segundo lugar, porque el objeto de esta CA es cualquier afiliado del BE que haya firmado la petición de declaración de tendencia que la Mesa Nacional recibió antes de tomar la decisión sobre la CA. Así, más que un caso de supuesta “afiliación fraudulenta”, lo que se investiga es la simple pertenencia a un grupo, ya que entre los investigados existen personas que estaban afiliadas al BE antes de entrar en SR.
En tercer lugar, porque la propuesta de constitución de la CA que la Mesa Nacional votó tenía un tono acusatorio, manifestó la existencia de una “infiltración”. Parece darse por probado de partida lo que se pretende probar. El objetivo de la formación de la Comisión Aclaratoria parece ser apenas una formalidad para sancionar a militantes, expulsándolos eventualmente, además de que en su composición apenas hay individuos pertenecientes a una moción.
En cuarto lugar, porque si por un lado esta acusación de “infiltración” es de partida imposible de probar, por otro también es imposible de rebatir. No obstante, la acusación viene acompañada del intento de invertir la carga de la prueba: serían los camaradas cuestionados los que tendrían que probar que no son infiltrados, y no quien acusa el que probara que hay una infiltración.
En quinto lugar, toda esta cuestión se ha acompañado con el “fantasma del entrismo pasado”. Aunque los investigados han asumido siempre públicamente (en publicaciones online y en papel), tanto dentro como fuera del Bloco, su pertenencia al colectivo, se ha propagado la tesis de que hay una infiltración secreta.
En sexto lugar, se ha cuestionado que estos afiliados no se hayan reunido previamente con la dirección. Sobre esto, consideramos que dicha reunión debería haber sido pedida hace más tiempo por los afiliados de SR. Sin embargo, no consideramos que sea motivo para instalar una CA o de expulsión.
El hecho es que antes de la formación de la CA hubo una petición de reunión con la dirección, unida a una solicitud formal de formación de tendencia. La dirección podía y debería haber tomado la iniciativa de dialogar con estos militantes, pero, por el contrario, eligió simple y llanamente la vía disciplinaria en detrimento del diálogo.
En séptimo lugar, la acusación de violación del principio de “adhesión individual” es paradójica. Aceptándola, los miembros de SR no podrían afiliarse colectivamente ya que estatutariamente no existe la afiliación colectiva al BE, ni se podrían adherir individualmente ya que participan en un colectivo que piensa que tiene sentido hacer política dentro del BE.
Subráyese que el Bloco es conocido por su apertura en cuanto a los grupos organizados en su interior. Grupos que se definían como tendencias permanentes y oficializadas, asociaciones políticas legalizadas o simples colectivos. En el pasado antiguos miembros de organizaciones se afiliaron individualmente al Bloco sin que sobre ellos se haya levantado una nube de sospecha.
Por último, la acusación contra SR se apoya en el hecho de que este grupo tiene una afiliación internacional. Hay que decir, en honor a la verdad, que siempre existieron y siguen existiendo grupos internos en el BE con afiliación internacional, lo que hace inaceptable cualquier presión en este sentido. Por otro lado, la acusación parece ir en el sentido de vigilar las posiciones asumidas por el grupo internacional al que estos camaradas pertenecen. Por más que estemos distantes de las posiciones políticas de este grupo, consideramos que el debate político sobre estas posiciones no puede, en ninguna circunstancia, convertirse en una cuestión de índole disciplinaria.
Así, los firmantes de este documento, a pesar de sus diferencias políticas con los adherentes del grupo Socialismo Revolucionario, dan la bienvenida a todos los miembros de SR que ya son o pretenden ser militantes del Bloco de Esquerda.
Los firmantes declaran además que no aceptan pasar de un Bloco de Esquerda como partido anticapitalista, amplio y plural a la idea de un partido donde el derecho de admisión está vetado a quien se organiza en posiciones críticas en relación a algunas opciones del partido y de la mayoría de su dirección, comprometiendo así la diversidad y el debate que siempre fue base de nuestra militancia y nuestra movilización transformadora en sentido de la justicia social.
Esta carta abierta está disponible en la web (https://democraciaepluralidadebe.wordpress.com/), donde se podrá consultar la lista actualizada de firmantes.
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